Las redes sociales se describen como estructuras
sociales compuestas por personas que cuentan con características en común; sin
embargo los vínculos pueden ser muy variados según su naturaleza. Este concepto
social es consolidado enormemente los últimos años, siendo entonces una
estrategia de interés para la tecnología educativa y su difusión.
Entre las redes sociales
más destacadas se cuenta con Facebook, twitter, LinkedIn, Google+, entre muchos otros.
Chinchilla y Lizcano (2010) Mencionan que “La Educación Virtual es una estrategia educativa que permite una alta interacción entre los actores del proceso educativo, interacción posible en ausencia de un espacio y tiempo común entre los participantes” (p. 21).
Tomando como referencia la apreciación de Chinchilla y Lizcano, se puede resaltar entonces la flexibilidad que ofrece la educación virtual al alumnado, quien es autónomo en relación al tiempo y los horarios que él considere adecuados dedicar a su labor como aprendiz, se debe tener presente que en esta modalidad de educación se requiere que el alumnado sea proactivo, autónomo, líder y responsable con su proceso de formación. Éstas características pueden ser cumplidas de forma fácil haciendo uso de las redes sociales, siendo un apoyo para el trabajo desde casa y con la creación de redes de aprendizaje, aprovechando la característica de éstas, que permiten la conexión de grupos de personas con un fin en común.
Considerando que se requiere de alto nivel de compromiso con el proceso de formación, es indispensable que el aprendiz demuestre ser autónomo en la búsqueda de información, para ello cuenta con innumerables herramientas que le permiten desde un solo clic acceder a información de nivel mundial, asumir la responsabilidad que requiere en su proceso de formación.
La labor del docente en todos los escenarios educativos, sin importar la modalidad de educación, es ser un agente mediador, entre el aprendizaje y el estudiante, en otras palabras, el docente debe guiar al estudiante en su proceso de formación, brindándole herramientas que ayuden a la construcción de aprendizajes, sin dejar de lado la oportunidad de que el estudiante genere aprendizajes desde su propia experiencia. Las tecnologías de la información y la comunicación indudablemente favorecen el proceso educativo siempre y cuando se haga un uso apropiado de éstas, a los estudiantes les agrada y motiva en la mayoría de ocasiones que el docente incorpore materiales tecnológicos al desarrollo de clase, pero no basta con la incorporación, sino, que dé como resultado la adquisición de aprendizajes significativos , entonces podríamos concluir que el uso adecuado de las tecnologías de la información y la comunicación en los procesos educativos sirven como estrategia de enseñanza para lograr aprendizajes significativos en los estudiantes.
Para concluir es importante anotar que la incorporación de las tecnologías TIC como las redes sociales en los procesos educativos desarrollan en el estudiante habilidades de liderazgo y autonomía en su práctica educativa, lo cual, le será de gran ayuda en su práctica profesional, cabe recalcar que para incorporar las herramientas tecnológicas al proceso educativo no es necesario que estemos hablando de una educación completamente tecnológica, el docente en su clase puede apoyarse en el abanico de posibilidades que éstas ofrecen para dinamizar su labor.
Coincido que las nuevas tecnologías de la información como el acceso a redes de información redefinirán nuestras tareas intelectuales. Retomando su planteo sobre el concepto aprender a aprender, que no se trataba de llenar disquetes con información, como en algunas propuestas didácticas se llenan carpetas con recortes de diario que nadie lee, ni de acumular folletos que nadie consulta, sino de utilizar un medio para acceder a nueva información realmente necesaria y con posibilidades de ser transformada en el contexto de una actividad y de un contenido específico. Es decir, los docentes tenemos que dejarnos actualizar por las nuevas tecnologías, no tenerles miedo, conocer su uso e incorporarlas a nuestro campo para que sean vehículos educativos, y herramientas de gestión académica.
Podemos concluir que las redes sociales en la educación tienen un impacto positivo, pues éstas brindan la posibilidad de estar en contacto con sus pares y sus docentes, además son una herramienta eficaz de comunicación sincrónica y a sincrónica; pero también pueden llegar a impactar de manera negativa, ya que permite el ciber-bullyng, la copia de trabajos faltando a los derechos de autor. Por esto, como se menciona anteriormente las instituciones educativas deben hacer de las redes sociales un medio para que los estudiantes aprendan, repasen, experimenten y estén en contacto para mejorar su rendimiento académico; este proceso se inicia con la creación de redes sociales por parte de la institución educativa y seguidamente vincular a los estudiantes para mantenerlos informados sobre el colegio y con ganas de aprender cosas nuevas, fomentar y motivar.











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